jueves, 31 de diciembre de 2009 | By: Roque

Universo

Escribir es más
que una representación
que una simbolización
o un conjunto de ideas.

Usted señorita,
es más que eso
por que no es suficiente
o no alcanzan palabras.

Para retratar
su linda cara,
su suave piel,
o la delicadeza de sus manos.

Su interés por conocer,
su linda voz
todo, todo eso
es único y propio.

En síntesis
es irrepetible
y no hay otra cosa más
que su esencia.

Ya que el mismo perfume,
no llega a ser tan mágico,
tan lleno de vida
como su fragancia.

Los colores
que viven en su rostro,
que cualquier arcoiris
envidia por ostentar.

Las preguntas,
inquietudes,
cuestionamientos,
que dan luz a su saber.

Tratar de ver
sus palabras,
con las sensaciones
que produce.

Por eso las palabras,
son tan pequeñas
para el gran y bello universo
que es usted.

Luna

Tú eres mi luna
resplandeciente en el amanecer
encendiendo tu belleza
detrás de aquellas nubes

Iluminada
tan blanca
viendo
mi caminar en la mañana

Con tu gran luz,
me sonríes
de forma linda
y tan efusiva.

Me invitas
a seguirte
a besarte
a verte.

Tu reflejo,
me seduce,
me lleva
a la estación del tren

Donde puedo
y quisiera más bien
retratarte
con estas palabras.

Escribo y me vigilas,
tienes cuidado
de todos mis pensamientos,
de mis deseos.

Disfrutas tanto
el coquetearme,
y yo no me resisto
a saludarte.

Mientras el amanecer transcurre
y la madrugada va tomando
sus colores violetas
te me vas escapando.

También yo me voy,
en mis ropas,
en mi loción,
en mi locura.

Partiremos a nuestra cita
esperando el ocaso
mientras yo sé bien
que me cuidas.

A veces como madre,
a veces como amiga,
privilegiadamente como novia,
encantadoramente como amante,
pero siempre, siempre, siempre
como mujer...
lunes, 28 de diciembre de 2009 | By: Roque

Salir

Si me atreviera,
a despertar animosamente
a caminar sin tanta prisa
mi vida sería otra.

Si sonriera más,
y no pensara tanto,
si me diera la oportunidad
viviría más alegre.

Yo no sé
como se vive,
cómo se come,
incluso cómo se duerme.

Sólo sé que existe
la sangre que recorre mis venas,
la luz que inunda mi cuarto
las voces y gritos.

Me veo
como un ser tan minúsculo
tan reducido
vil escombro

A veces decido
no dejarme colgado
en aquella esquina
y suelo, muy a mi pesar, salir.
viernes, 25 de diciembre de 2009 | By: Roque

Piel

Salíamos y tomábamos
platicábamos de tantas cosas
en medio de aquel pequeño centro
buscando acrecentar la tarde.

Me gustaba verte
tan blanca
tan temerosa
fumando tu cigarro.

Te escuchaba
tus anécdotas
tus frustraciones
tus sueños

Pasaban los minutos
y el tiempo se nos iba cerrando
pero aún así,
lográbamos cambiar de lugar.

En la oscuridad de un callejón
me gustaba tomarte por sorpresa
darte un beso y abrazarte
sentir tus manos con las mías.

Cuando podías
te escapabas a mi cuello
y yo me encaminaba
a tu cintura.

Nos gustaba ser asi,
escondidos,
por que ahí realmente
estábamos los dos.

A veces la noche
nos hacía otra invitación,
para conocer
aún más la intimidad.

Seguíamos en otro beso,
mientras desnudos
sabíamos lo que era
la tibieza de las caricias.

Cuando por fin,
estábamos abrazados
sin nada más que
nuestro ser.

Cuando en tu mirada
estaba la mía,
deseando
no perderme de nuevo.

Al besar
tu linda espalda
y perderme
en su suavidad

Pero regresar a la realidad
era una lenta marcha
de la cuál
queríamos volver.

De nueva cuenta,
de regreso
a mi casa
a mi rutina.

Anhelo
el volver romper el tiempo
y escaparme
en tu piel.

Sonrisa

Te volví a ver
ya no tan triste ni tan extraviada,
vestida de negro
con una pequeña sonrisa.

Pienso que el día,
ahora se confundía contigo,
tan presuroso,
tan nostálgico.

Ahora no te veías
en aquel espejo
donde reflejabas tu preocupación,
tus estados del día común.

Hablabas hacia un compromiso,
al parecer
por que ahora te vi
más animada que el otro día.

Solo te vi caminar
por la calle
con paso presuroso
confundiendo tu sombra con el día.

Tu andar me recordó
mi trote matutino,
mi presuroso paso
el camino a mi obligación.

Pero hoy día
al igual que tú
tengo
una linda sonrisa.
viernes, 18 de diciembre de 2009 | By: Roque

Poesía

Mis días grises
ocupan ya un lugar
predilecto al escribir
y transformar las palabras.

Por que hoy día,
puedo encontrar todo lo delicado
lo sumiso y extraño,
aquello que es normal.

Soy una persona horrible,
en el sentido que no dejo,
o no quiero que se acerquen,
como si yo fuera una fiera.

Me manejo de forma rara,
al no hablar con nadie,
al ser reservado,
al ser frío.

A veces siento que en verdad,
un bozal no me caería mal,
o bien una correa
y unas clases correctivas.

He estado escribiendo,
desde hace mucho,
y miles de ideas
escurren de mi pensar.

Pero hay días
en que puedo bromear
y suelo decir
hoy quiero encontrar poesía.

Como cuando le digo a alguien
que le haga ojitos
y le hable bonito a otro
para que le hagan un favor.

O bien en las ocasiones
en que logro decir
¡mira que bien salió!
cuando sólo tengo lágrimas por dentro.

Las lindas cosas
una manzana,
una chica,
un gracias.

Caer en mi cama,
conteniendo mi cuerpo
que se trata de escapar
de todas sus prisiones.

Al fin poesía,
verso con verso
miradas con nostalgia,
suspiros profundos.
jueves, 17 de diciembre de 2009 | By: Roque

El colapso del hombre común

Nací de dos ingenieros,
de personas lastimadas,
de artistas frustrados,
de un pintor y una bailarina.

De niño
existieron los gritos,
los regaños y los golpes,
momentos de dolor.

Cuando empecé a escuchar,
conocí a Karajan
y al poco tiempo
quise ser un director de orquesta.

Las cosas que veía,
eran duras
pero empecé a leer
todos mis libros de historia.

El pintor un día me dijo,
que lo mejor de leer,
era que podías imaginar
y me hizo una persona creativa.

La bailarina
me decía que me podía comprar
siempre y cuando
fueran libros.

En realidad
me iba bien en la escuela,
aunque siempre me sentía
con miedo.

Mis compañeros
me trataron bien
otras veces mal
como cuando me metieron al bote de la basura.

Un día estudié
para ser religioso
y la responsabilidad
entró en mi.

Entré a la universidad
y no disfruté
lo que vive el estudiante
por trabajar.

Entraba a trabajar en la noche
en un lugar oscuro
que daba y sigue dando
horas de diversión.

Me hice amigo de proyectores
y claro
también a aquellos que llaman
cácaros.

He viajado por México,
España, Francia
Inglaterra, Bélgica
Holanda y EUA.

Trabajo actualmente
para muchas causas
e intereses
menos el mío.

He llegado al punto
de no querer saber
que pasará después
ahora si... estoy en el colapso.

El colapso de un hombre común como yo.


Frío

El frío me recibe
me da los buenos días,
en esta madrugada
en la que acaricia mis mejillas.

Él me anima
a apretar el paso,
a encontrar a la gente,
a viajar.

De manera especial me reconforta,
ya que él mismo suele ser duro,
como los regaños que viví
cuando era niño.

Pienso que no he conocido
todo lo que podría ser él,
ya que en la mañana
pienso que se va sin despedirse

Cuando mi alma me abandone
pienso que podré tocar mi cuerpo
rígido y sin expresión
con los ojos perdidos.

Espero que ese día,
por fin me diga
con una gran sonrisa
¡Hasta luego1!

domingo, 13 de diciembre de 2009 | By: Roque

Rostro

Mis palabras están envueltas
en el amor de quién busca,
y quiere reconfortarse.

De quien al momento de hablar,
sus pensamientos son eternas imágenes
que escapan del mundo de las emociones.

Mi mirada tan llena de afán
y tan cálida,
también te encuentra
tan frágil y linda.

Con tu carácter fuerte
y a la vez de niña
con tu no puedo y con mi quiero,
con tu silencio y mi boca cerrada.

Mi alma y mis nervios
al borde del éxtasis,
doy el salto del abismo
del único sonido de nuestras respiraciones.

Buscando casi de manera obsesiva
tu mano,
para que se encuentre con mi rostro,
que no está roto.

Para que con tu otra mano
detengas la otra parte de mi cara,
para que encajes las piezas
de este rompecabezas que soy.

Por que todas las partes,
de mis piernas,
de mi abdomen
ahora son un juego tuyo.

Ahora me pintas
de un color azul
y me vistes de niño,
dibujándome una sonrisa.

O a veces me pones un traje
y me escondes una cartera,
con una carrera universitaria,
y un lindo futuro.

Por que me gusta
jugar contigo a los novios,
tomarte de las manos
y dormir a tu lado.

Por que en definitiva,
me agrada
y me enriquece
ser tuyo.
jueves, 10 de diciembre de 2009 | By: Roque

Rutina

Yo no tengo más cosas,
que mis manos,
que mis oídos,
que mis palabras.

A veces lo que digo,
no gusta,
no complace,
simplemente se vuelve intrascendente.

A diario vivo lo mismo,
cuando al querer hablar,
mis palabras no tienen conexión,
con lo que pasa alrededor.

Soy distinto,
tan diferente a los demás,
que en parte me hace sentir bien,
pero la mayor parte me hace sentir mal.

Tal vez pienso
que lo mejor sería,
tener una vida normal
con esposa e hijos.

Pero no puedo engañar
a todo lo que me gusta
la música ruidosa,
el tomar y divagar en mi pensamiento.

El paso de las semanas,
de los meses y los años,
me han enseñado
a ser fuerte, casi como una piedra.

Pero pienso que el ser así,
hace que la gente se retire de mi,
de por sí más...
de lo que ya está.

Yo no sé qué hacer,
para parecer atractivo,
para sonar lindo,
para hacer reir a todos.

Existen muchos momentos,
en los cuales pienso
que nací en el lugar equivocado,
ya que me considero de buenas intenciones.

Creo que no todos
podrán compartir mis ideas,
no sé quién sí,
no sé quién no.

Hoy solo puedo escribir esto,
al tiempo que escucho mi música,
mi fiel refugio,
sabiendo que terminaré preparado para trabajar mañana.
lunes, 7 de diciembre de 2009 | By: Roque

Vidrio

El regreso
no podía ser más lento
y apretujado
que la noche del lunes en el tren.

Repleto de gente gris,
desbordando cansancio,
llenos de hambre
y desconcierto.

Cualquier movimiento que realices,
puede ser usado en tu contra,
bien sólo sea por accidente,
lo importante es desahogarse.

Y entre todas las historias,
pendientes por escribir
una capta
la fragilidad de mi visión.

Cuando veo llorar
a una chica gris
como yo,
hablando sin destino.

Únicamente viéndose
a través del reflejo del vidrio,
escuchándose
a través de sus palabras.

No importa si la ven,
mucho menos si la entienden,
ella está triste
y por eso se busca a ella misma.

No podía decirle nada,
por que existía en mi esa barrera,
del ser ajeno,
del ser triste, pero extraño.

Me gustaría ayudarla,
pero no siento que quiera ayuda,
ya que me ve
un tanto desconfiada.

Pero ahora me interno,
en la imagen del vidrio,
y también ahí veo
que yo también estoy triste.


sábado, 5 de diciembre de 2009 | By: Roque

Ambar

Pude ver esa botella,
vacía
como en ciertos momentos
me siento yo.

Pude ver su color,
ambar,
neutro
lleno de seriedad.

Me llevo una sorpresa
al momento de verla
a través de sus rincones y
de su linda forma.

Me encantaría
ser el líquido que contiene
para ver todo diferente
a través de ese color ambar.

De hecho ayer me sentía así,
al estar caminando de regreso
y ver los coches rápidos
en una vía lenta.

Al ver los árboles
moviéndose lentamente con el aire
iluminados por esa luz
de color amarillo.

Estando sentado junto
a una chica guapa
y ella no estaba enterada
de mi existencia.

No todo es la claridad
como me lo hacen ver,
como me lo reprenden,
o como a veces sueño.

Y si...

Una noche ya estaba ahí
en la reunión
de gente riéndose
y disfrutándome.

Cubriéndose de la lluvia,
escapando de la neblina,
buscando el calor
y un buen rato.

No supe cómo,
pero no existían
inhibiciones,
ni prohibiciones.

Todo era una linda comedia,
en la cual las malas palabras,
eran tan divertidas
que el mejor comediante no sabría usarlas.

Me disfrutaban
con mi sabor amargo
llenando su vejiga
y ellos me deshacían con su orina.

Ahí estoy... soy ámbar